Gestion Macri: de la inaccion al derrumbe
14 noviembre 2011
El 26 de Septiembre, un mes y ocho días antes del derrumbe del edificio de Bartolomé Mitre al 1200, un inspector del gobierno porteño advirtió, tras una visita a la obra en construcción lindera, que en ese terreno donde estaba prevista la excavación para hacer “tres subsuelos” había “dos edificios linderos de importante altura y de antigua data”, por lo cual recomendó expresamente “verificar submuración”. 
La advertencia, que podría haber evitado el derrumbe que costó la vida de Isidoro Madueña, no fue escuchada. El gobierno de Mauricio Macri no envió, a pesar de la recomendación de verificar submuración en dicha obra, ningún profesional a controlar que se realizara el apuntalamiento con un refuerzo de hormigón de la medianera que va quedando al descubierto con la excavación.
Si bien existe una Ley, la Ley 3562, que ordena el control por parte del gobierno porteño de las etapas de excavación en las obras en construcción, sucede que la Agencia General de Control(AGC) no está obligada aún a realizar dichos controles porque el Jefe de Gobierno porteño MAURICIO MACRI AÚN NO REGLAMENTÓ DICHA LEY a pesar de haber sido sancionada hace más de un año por la Legislatura.
Javier Ibáñez, titular de la AGC, expresó que la Ley 3562 aún no había sido reglamentada por Mauricio Macri debido al lobby realizado por las empresas constructoras y la propia Asociación de Ingenieros Estructuralistas para evitar se reglamentara la mencionada Ley cuya finalidad es controlar la construcción y salvaguardar bienes y sobre todo, vidas. Por lo visto Mauricio Macri privilegia los intereses y la avaricia de empresas constructoras e inmobiliarias sobre la vida de los ciudadanos porteños.
2 comentarios:
lastima que los porteños no se dan cuenta de nada, tengo compañeros de trabajo que ni les importa lo de los derrumbes, es terrible !
El mayoritario voto PRO confirmado el 31 de julio pasado, (64,2% contra un 35,8 % del FPV) no fue el producto de ciudadanos apoyando un determinado proyecto de ciudad sino una clara manifestación anti-K que se vió corroborada por el resultado de las presidenciales del 23 de octubre: 63,37% de los opositores contra 37,35% del FPV.
Resulta una indudable demostración la de los porteños cuando más del 60% no vota "por" sino "en contra de".
De ahí que las consecuencias de un segundo mandato PRO no resultarán mejores que las del primero.
La sub-ejecución en los montos para educación y salud públicas, la casi nula ejecución de obras de magnitud en transporte subterráneo (contradiciendo sonoramente lo postulado como propuestas para el primer gobierno), y la extraña y trágica moda-derrumbe que anima la vida porteña de los últimos 3 años y medio muestran las capacidades e intenciones PRO.
Es lamentable, pero los pueblos tienen los GOBIERNOS QUE SE LES PARECEN.
Día a día, se está poniendo más linda Buenos Aires ...
Saludos
Tilo, 70 años
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