§ In Poculis § : Noble Herrera, ADN y lagrimas de cocodrilo

En el día de la fecha se realizó un nuevo allanamiento, esta vez en la casa de Ernestina Herrera, a fin de obtener muestras de ADN de los hijastros de la mencionada, Marcela y Felipe; quienes podrían ser hijos de desaparecidos durante la dictadura militar. El allanamiento fue ordenado por la jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado tras la audiencia que mantuvo con los Noble Herrera. En la mencionada audiencia la jueza preguntó a Marcela y Felipe Noble Herrera si accederían a dar muestras de sangre nuevamente a fin de realizar los análisis de ADN, a lo cual los hijastros de Ernestina Herrera se negaron. Ante la negativa, el allanamiento.

Los abogados de los Noble Herrera calificaron la acción como vejatoria ¿Por qué?

¿Acaso la Ley Nacional 26.548 (ADN-BNDG)no establece que ante la negativa a dar muestras de sangre de manera voluntaria, la Justicia está autorizada para ordenar la obtención de ADN de imputados o víctimas más allá sus voluntades?
Si, así lo establece.

Los hermanastros Noble Herrera reiteraron que el Banco Nacional de Datos Genéticos no les ofrece garantías de intangibildad y seguridad y mantuvieron su solicitud que los análisis se realizaran en sede judicial. Los mencionados parecen creer que están por encima de la ley al realizar tal pedido, pues la Ley Nacional 26.548 establece que es el BNDG el organismo encargado de realizar el análisis y la determinación de patrones de ADN por contar in situ con los medios necesarios para la realización de dichos exámenes. Es en cambio lo solicitado por los hijastros de Ernestina Herrera, la realización en sede judicial de la determinación de patrones de ADN, lo que verdaderamente no ofrece garantías; toda vez que el Juzgado no cuenta con las instalaciones ni la aparatología necesarias para realizar análisis de patrones de ADN. Ante tal circunstancia, el Juzgado está obligado a enviar las muestras de sangre a laboratorios externos, con lo que intangibilidad y seguridad de las muestras biológicas es dificilmente garantizable. Con sus lamentos quejumbrosos y sus lágrimas de cocodrilo pretenen distraer de la realidad que un laboratorio externo, ajeno a la esfera judicial y estatal es mucho mas fácil de ser sobornado que el Banco Nacional de Datos Genéticos.

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